Coincidiendo con las festividades patrias de México, la banda Un Corazón presenta una versión regional de su sencillo “Regrésanos“, interpretado por Kim Richards.
El lanzamiento busca conectar con las raíces musicales de México y América Latina, integrando sonidos tradicionales con el estilo worship característico de la banda.
Steven Richards, productor del tema, destaca el esfuerzo por capturar la esencia musical del continente.
“Pudimos traer a la memoria las raíces musicales de nuestro país y de casi todo el continente, porque en la canción hay elementos, sí, muy mexicanos de mariachi, casi un bolero también, pero hasta un tango y muchos sonidos de los que identifican a la música latina tradiciona”, dice Steven Richards.
La colaboración con reconocidos talentos como Kiko Cibrián en la mezcla, Luke Pimentel en la masterización, Erick Acuña en los arreglos y grabación de los instrumentos y una orquesta sinfónica paraguaya, dirigida por Sergio Cuquejo, enriqueció la complejidad sonora del sencillo.
Además de su notable producción musical, “Regrésanos” destaca por su profundo mensaje espiritual.
Kim Richards, quien creció en Ciudad Juárez, Chihuahua, relata que la canción refleja la simplicidad de la fe infantil que experimentó durante su niñez.
“Creemos que, como iglesia, hemos perdido esa inocencia y fe que teníamos como niños. Toda la banda y autores fuimos niños que crecimos en la iglesia y esta canción es una invitación a volver a ese origen“, expresa Kim.
El estreno del sencillo viene acompañado de un emotivo videoclip grabado en un rancho cerca de Ciudad Juárez.
El video, conceptualizado en torno a la relación entre una niña y su padre, representa la conexión entre la imaginación infantil y la relación con Dios.
Según Kim Richards, la historia refleja cómo la pureza y la confianza de los niños pueden fortalecer nuestra relación con el padre celestial.
“Nuestra infancia al crecer en una ciudad humilde de México. Hay una niña y su muñeco de peluche; después nos damos cuenta de que el oso de peluche en realidad es su papá (con un disfraz) y representa cómo la imaginación e inocencia de niños fortalece nuestra relación con nuestro padre celestial“, precisa la cantante.
La canción y el video invitan a los oyentes a recordar la simplicidad de la fe, con versos que claman: “Regrésanos, restáuranos, para escucharte hablar y confiar una vez más“.