El carismático cantante argentino, Gabriel Bazán, remite al oyente al tango y a su sencillo “Prisionero“; la alegría y plenitud que se encuentran cuando una persona es cautivada por el amor de Dios.
El tema fue producido por Federico Lepre, quien junto a Bazán, también colaboró en la composición de la letra.
«Prisionero» es una canción de pop latino que se destaca por la influencia del tango argentino, notable desde las primeras notas. El sencillo busca contagiar vida, alegría y esperanza, que paradójicamente se encuentra cuando se es prisionero del señor.
La idea de la canción surgió del título que el apóstol Pablo se dio a sí mismo en Efesios 3:1: «Yo, Pablo, prisionero de Cristo Jesús por el bien de ustedes los gentiles» (NVI). Gabriel Bazán se declara un prisionero voluntario del Señor, con el deseo de quedarse únicamente con el amor de Dios, que transforma y purifica.
El cantautor afirma que hay «momentos puntuales en los que uno se encuentra en la búsqueda de la salida a problemas y luchas, pero cuando nos encontramos cara a cara con el perdón [de Dios], vemos que no hay otra mejor opción».
A la par de la canción, también se presenta el videoclip oficial del sencillo, dirigido por Esteban Bazán, y que fue grabado en uno de los lugares históricos y más emblemáticos de la ciudad de Salta, en el norte argentino, ubicación en la cual resalta la arquitectura nacional.
«Mostramos la esencia del tango argentino y la intención de redimir el significado del bandoneón, instrumento que llegó a la Argentina para adorar a Dios en las iglesias, pero que por motivos de corrupción terminó usándose en lugares oscuros», comenta Gabriel Bazán acerca de su videoclip.
Actualmente de gira por España, Gabriel Bazán está expectante de la difusión que «Prisionero» tendrá en América Latina. En el próximo mes de julio tendrá una gira por Bolivia y continuará lanzando música nueva.
Con oficina de prensa.